El Real Madrid y la Plaza de Cibeles tienen un vínculo de alegría que cada vez que se repite, es por una buena causa. El conjunto blanco tiene en la céntrica y madrileña plaza su lugar oficial de celebración, donde festeja los títulos de Liga y Champions League, tal y como sucede en una temporada 2023-24 para la historia del club. A continuación, te contamos por qué el Madrid y la Cibeles están unidos y qué significa la diosa para los célebres aficionados madridistas.
Todo madridista conoce las tradiciones y los símbolos del club y la Cibeles es uno de ellos, para muchos el más importante, ya que es el que desprende éxito al resultar el lugar de celebración de los títulos. En el año 2024, el Madrid ha visitado la Plaza de la Cibeles en dos ocasiones, una para festejar el título de Liga EA Sports, conquistado con manifiesta superioridad sobre Barcelona, Girona y Atlético de Madrid, y después para el festejo de la Champions League, la Decimoquinta, ganada al Borussia Dortmund con goles de Carvajal y Vinicius.
El plan de celebración del Madrid
.Tras ganar un título, el Real Madrid acostumbraba, en la medida de lo posible, a celebrar en el Estadio Santiago Bernabéu y también en Cibeles, en la misma noche del éxito. La conquista de la Champions League acostumbraba a complicar este festejo por los horarios, así que en las últimas ediciones, se ha optado por retrasar un día la celebración en la Plaza de Cibeles, para que puedan acudir más madridistas con amigos o familia en un plan espectacular a plena luz del día o entrada la noche sin necesidad de ir hasta la madrugada.
Tanto si ganan la Liga, como la Champions League, el Real Madrid acostumbra a hacer un recorrido que parte bien desde el Estadio Santiago Bernabéu o desde Valdebebas, para después marchar a la Catedral de la Almudena –en los títulos de campeón de Europa–, después a la sede de la Comunidad de Madrid y al Ayuntamiento de Madrid, que se encuentra a escasos metros de la estatua de la diosa Cibeles. Al salir de esta parada, la fiesta en Cibeles es un seguro de vida, que en ocasiones tiene su colofón final en el Estadio Santiago Bernabéu.
La historia del Real Madrid y la Cibeles
Hablar del Real Madrid y de títulos es sinónimo de Plaza de Cibeles. La céntrica fuente madrileña, ubicada delante del Ayuntamiento de Madrid, es el punto de unión donde miles de madridistas se unen con los futbolistas del primer equipo cuando tienen un campeonato que celebrar, como la Liga Santander, la Champions League o la Copa del Rey.
Los aficionados del Real Madrid sueñan con ver a los futbolistas en el autobús por las calles de la capital española. Un baño de masa para los héroes que termina en la Plaza de Cibeles, donde el capitán le coloca la bufanda del equipo a la diosa y los jugadores desfilan por la pasarela para celebrar el título con los suyos, mientras cantan con ellos y cogen el micrófono para dedicarle unas sentidas palabras a los hinchas.
Pero muchos aficionados se preguntan el origen de por qué el Real Madrid y sus aficionados acuden a la Plaza de Cibeles para celebrar los títulos. La respuesta es bastante rocambolesca, pero se ha convertido en una tradición que cada vez que la entidad de Concha Espina gana algún torneo importante acudan todos en masa a la citada ubicación para festejar por todo lo alto el trofeo pertinente.
El primer equipo que celebró un título en la Plaza de Cibeles fue el Atlético de Madrid en la Recopa que ganaron en 1962. La fiesta se trasladó a la fuente porque estaba cerca de la sede del club colchonero, pero unos años después, en 1986, en una noche muy calurosa en la capital de España, los madrileños acudieron a la Cibeles para celebrar el triunfo de la selección ante Dinamarca con cuatro goles de Emilio Butragueño en el Mundial de México.
Esa noche los hinchas se metieron en la fuente para apaciguar el calor y eso fue un punto de inflexión en esta historia, sumado a que unos meses antes los Sanchís, Michel, Martín Vázquez y compañía ya se habían pasado por la Plaza de Cibeles para festejar la Liga que habían conseguido ese mismo año.
A partir de ese momento el Real Madrid de la Quinta del Buitre tomó la Plaza de Cibeles para celebrar cualquier título del club blanco. Cada vez acudía más gente y se empezó a convertir en una rutina que dura hasta nuestros días. Como dato adicional, al ver que los madridistas comenzaban a hacerse con el ‘control’ de la fuente, los colchoneros decidieron desplazarse unos metros para hacer suya la Fuente de Neptuno.
